Hilo rojo del destino

Hilo rojo del destino: ¿Estamos predestinados a conocernos ?


«Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar tiempo, lugar o circunstancias. El hilo se puede estirar o contraer, pero nunca romper». 

¿ Las personas nos conocemos por casualidad, o existe quizás un hilo invisile que guia estos encuentros? 
Segun la cultura japonesa (nipona) nos dice que cada persona esta predestinada unos con otros mediante un hilo rojo. un hilo rojo que a simple vista de nosotros no lo vemos y dicho hilo esta atado a nuestro dedos meñiques.

El hilo rojo del destino 
los japoneses siempre han sido muy especiales en materias de tradiciones. el mito del hilo rojo del destino esta bastante arraigado en dicha sociedad. proviene del concepto nada es casualidad. que nuestros amigos y pareja no han llegado a nosotros por coinsidencia. 
Dicha tradicion consiste en que todos nosotros nacemos con un hilo rojo atado a nuestros meñiques que a su vez unidos a otras personas. Este hilo puede enredarse o tensarse. Pero el hilo nunca se rompe. Jamás. y todo acabamos conociendo a las personas para las cuales, se nos ha predestinado.
 ¿De dónde surge la leyenda del hilo rojo del destino? 
Esta leyenda se origina a raiz de un descubrimiento médico. Que las personas poseemos de una arterioa que une el corazón con el dedo meñique. Este hecho evoco una imagen llena de magia y simbolismo donde se relaciono lo biologico versus lo sobrenatural.

Un ejemplo viable de esta creencia popular, se refiere a muchos testimoniso de la época del Periodo Edo (1603-1867), Cuando algunas mujeres para demostrar el amor a sus esposos se amputaban el dedo meñique con la finalidad de demostrar a sus esposos que estaban unidas a ellos.
Los Yakuzas, ellos se amputaban elk dedo meñique en señal de traicion, para no seguir más con este vinculo que loes pertenecian.
Además existe una leyenda dotada de una belleza. que nos habla de un anciano que habita en la luna. su funcion consiste en salir cada noche en busca de almas, en busca de esas personas para que se unan en la tierra. El anciano las observa cuidadosamente y las elige y ata un hilo en sus meñiques para que no se pierdan y que ese hilo se encuentre.